El gobierno estatal analiza cortar los servicios de energía eléctrica y agua potable en los pueblos fantasma que hay en Sinaloa con el objetivo de que no se conviertan en nido de delincuentes.
El secretario de Desarrollo Social y Humano, Juan Ernesto Millán Piestch, dio a conocer que la próxima semana sostendrá un encuentro con el delegado de Sedesol, Regino López Acosta, y el superintendente de la CFE, Édgar Camacho Apodaca, a fin de establecer esta medida.
Reveló que en Sinaloa hay 56 pueblos fantasma, cuya población emigró a otras regiones derivado de la violencia y otro tipo de circunstancias, como buscar mejores oportunidades de vida.
Estas poblaciones se concentran en 11 municipios del estado, siendo Sinaloa el principal municipio expulsor y tres de ellas presentan desplazamientos definitivos desde hace 8 años y otras temporales.
“Suspendiendo el tema de electricidad, automáticamente el tema de agua potable se va”, dijo.
El secretario de Desarrollo Social y Humano manifestó que actualmente la cifra de desplazados en Sinaloa es de mil 177 familias con una población de 6 mil personas, de las cuales 350 de Durango y se encuentran distribuidas en los municipios de Mazatlán, Elota y Rosario.