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Culiacán, Sinaloa (Café Negro Portal). – La promesa del alcalde Juan de Dios Gámez Mendívil de autorizar la portación de armas fuera del horario laboral sigue sin cumplirse, y los resultados son trágicos: ya suman 14 policías municipales asesinados en los últimos siete meses, la mayoría en Culiacán.
El caso más reciente ocurrió este martes en la colonia Los Huizaches, donde un agente fue ejecutado y otro resultó herido tras un ataque armado.
“El grupo disparó más de mil veces. Ellos no portaban sus armas porque no está permitido fuera del turno”, lamentó un compañero de los oficiales agredidos, refiriéndose a los agentes José Adolfo y Christian.
Ambos fueron víctimas de una emboscada sin posibilidad de defensa, debido a que no portaban su arma de cargo fuera de servicio.
La violencia contra elementos de seguridad en Sinaloa no da tregua, y pese al riesgo, los policías municipales siguen sin contar con este derecho básico de protección.
Hace semanas, el alcalde aseguró que el trámite de autorización estaría listo “en un plazo de 24 horas”.
No obstante, la medida sigue sin concretarse. La falta de claridad sobre qué instancia debe gestionar la autorización —ya sea la Secretaría de la Defensa Nacional o la Secretaría de Seguridad Pública del Estado— ha paralizado el proceso.
“No sabemos qué esperan el alcalde Gámez Mendívil y el gobernador Rubén Rocha Moya para tomar acciones reales y protegernos”, expresó otro agente, quien solicitó el anonimato por razones de seguridad.
Por su parte, el presidente de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH), Óscar Loza Ochoa, ya emitió una recomendación formal para permitir la portación de armas fuera de servicio, la cual hasta ahora no ha sido atendida.
Mientras tanto, los agentes continúan patrullando bajo amenaza constante, sin garantías mínimas para su seguridad y con una promesa que sigue sin cumplirse.
