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Todos los megaproyectos planeados por el presidente Andrés Manuel López Obrador han sido sumamente criticados. El Tren Maya, las refinerías y, por supuesto, el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), el cual se encuentra en construcción tras la cancelación del que se realizaba en Texcoco desde el sexenio de Enrique Peña Nieto (2012-2018).
Esta obra, que se realiza en Santa Lucía, municipio de Zumpango, Estado de México, tendrá un costo aproximado a los 200 mil millones de pesos, según cálculos del propio mandatario: 100 mil millones por la cancelación del anterior proyecto, más 100 mil millones por el AIFA.
Dicha cifra fue duramente criticada por el abogado Diego Fernández de Cevallos en su columna publicada por el diario Milenio. En esta redacción, aseguró que el Aeropuerto de Santa Lucí es simplemente un “capricho de su Alteza Pequeñísima”.
“Según el gobierno, la cancelación del de Texcoco costó 100,000 millones (para “indemnizar” a los que sin pruebas y sin castigo acusó de “corruptos”), y el de Santa Lucía implicará una erogación que frisa en los 100,000 mil millones (sin contar el costo del predio y de las vías de acceso), eso implica que el capricho de su Alteza Pequeñísima (también conocido como Tartufo) nos costará, por lo menos, 200,000 millones de pesos”, destacó.
Asimismo, detalló la capacidad que tendrá el megaproyecto, pues sólo podrá tener 20 millones de operaciones anuales, cantidad menor a las calculadas en otros aeropuertos, como el de Querétaro, en el cual colaboró el ex militante del Partido Acción Nacional (PAN).
“Los ciudadanos requerimos información veraz y opiniones fundadas, para no errar en nuestras valoraciones, no importa que muchos, carentes de toda dignidad, solo vomiten ante cualquier atraco: ¡es un honor estar con Obrador!”, urgió Fernández de Cevallos.
De acuerdo con el “jefe Diego”, con los 200 mil millones de pesos que costará el AIFA, se podrían construir 138 aeropuertos como el de Querétaro, cada uno con una capacidad de 219,000 vuelos anuales, cantidad que otorgaría 30 millones de operaciones, 10 millones más que el AIFA.
Esta obra, en la que participó Cevallos, fue realizada en 2002 por el gobernador panista Ignacio Loyola Vera, a quien tildó de “probadamente honesto”, y tuvo un costo de 547 millones de pesos, 400% menos que la cantidad gastada por AMLO para su aeropuerto.
Sobre este tema, Fernández de Cevallos realizó un listado de los aspectos más destacados de la obra, entre los que incluyó las 672 hectáreas de terreno adquiridas por el gobierno de Querétaro, los 15 mese que tardó su construcción y la erogación por el terreno y la obra civil, que tuvo un costo de 653 millones de pesos (1,450 millones de pesos actualmente).
Asimismo, también resaltó la pista de 4.2 kilómetros de largo, 45 metros de ancho, cubierta de concreto hidráulico y armazón de acero con la que cuenta, sus 18 posiciones comerciales, 3 con pasillos, 35 remotas de aviación general, 4 de carga; y las 2 plataformas de FBO y su Torre de Control, con una altura de 42 metros.
Esta crítica se da en el marco de la visita de supervisión que López Obrador realizó al AIFA el pasado domingo, misma que estuvo envuelta en polémica debido a una supuesta “simulación” durante el viaje que realizó en un tren con otros funcionarios, como Alfredo del Mazo, gobernador del Edomex; Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la CDMX; y Luis Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional.
No obstante, este supuesto montaje fue desmentido por Jesús Ramírez Cuevas, vocero de presidencia, y otras figuras de la Cuarta Transformación (4T) que en redes sociales se manifestaron al respecto y arremetieron contra Felipe Calderón y Joaquín López-Dóriga, quienes habían asegurado que se trataba de una simulación.
(Con información de Infobae)
