“La Academia” pasó a la historia como un programa que revolucionó el mundo de las competencias musicales en México, además de que logró posicionar en el ojo público a diversos talentos mexicanos.
Recordemos que, desde los inicios de este proyecto de TV Azteca, millones de personas asistían a los castings con la intención de formar parte de este ambicioso e interesante proyecto musical.
Y precisamente uno de estos talentos destacados en el mundo del canto fue María Inés Guerra, miembro de la primera generación de este exitoso reality show musical.
Ahora uno de los exintegrantes de “La Academia” más recordados de la primera generación ha causado furor debido, a que a pesar de haber quedado en el tercer lugar de la primera generación, lo cierto es que su vida en el gremio musical no se dio y ahora se dedica a vender teléfonos celulares y tacos de carne asada.
Se trata de el talentoso Miguel Ángel Rodríguez Chapital, quien se consolidó como uno de los favoritos del público y uno de los más votados, por lo que en el año 2002, cuando Myriam Montemayor resultó la ganadora del reality, él ganó en el tercer lugar de dicha competencia.
Vale la pena destacar que su voz fue una de las favoritas también de los expertos del jurado, además de que se consolidó como uno de los integrantes menos polémicos del reality y uno de los más queridos por el público debido a su carisma.
Sin embargo, cuando concluyó la primera generación del programa “La Academia”, el cantante reveló que los contratos que tuvo con la televisora del Ajusco no fueron suficientes para mantenerse, y es precisamente por esto que él se vio obligado a buscar la manera de sobrevivir e incluso se culpa así mismo por considerarse egocéntrico.
“De repente piensas que con tu talento todo lo mereces, pero no es así porque luego si se te crece el ego es por tonto, y eso te puede hacer sentir que mereces más”, reveló el exparticipante en 2012.
Fue así que, durante una entrevista en aquel entonces brindada a una famosa revista de espectáculos, Miguel Angel dio a entender que el creer que mereces mucho más te hace en ocasiones rechazar buenas oportunidades de trabajo, y fue precisamente lo que le pasó a él, por lo que después se vio obligado a buscar la forma de salir adelante.
“Empecé a vender celulares, aprendí a ganarme la vida de otras maneras, a mí no me da pena vender taquitos de carne asada y reparar equipos de cómputo”, confesó.
A pesar de que está agradecido con el proyecto de TV Azteca, lo cierto es que Miguel Ángel confesó que en algún momento fue rechazado y discriminado en dicho Reality, situaciones que lo desanimaron y que lo hicieron reflexionar respecto al gremio con el que se estaba involucrando.
Miguel Ángel actualmente tiene 38 años de edad y se sabe que tuvo dos hijos. Hace 11 años, Miguel Ángel aseguró que la madre de uno de sus hijos se había ido lejos, por lo que se convirtió en padre soltero y se gana la vida para darle todo a sus pequeños.