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Samuel Sánchez
Culiacán, Sinaloa (Café Negro Portal).-En una pequeña habitación de un humilde hogar elaborado de lámina de Teacapán, Escuinapa, se recupera el intrépido y soñador Luis, el adolescente de 13 años que recibió una fuerte descarga eléctrica al caer a un carcho donde se encontraba un cable de alta tensión que fue derribado este fin de semana durante el huracán “Roslyn”.
Pese al dolor que siente por las quemaduras que dejó la descarga eléctrica en sus brazos, dedos y pecho, no pierde su alegría y accedió a contar cómo sucedieron los hechos que casi le cuestan su vida.
“Yo fui a acompañar a los soldados y vi donde estaba el síndico de aquí (de Teacapán) en la esquina y me puse a platicar algo con él y yo le dije: ya me voy, espérame, me dijo. No, aquí está cerquita la casa, le dije y me fui caminando a la esquina por el zacate; estaba corriendo aire y estaba lloviendo. Me pegó el cable aquí y después me lo quise quitar y luego me pegó aquí”, narró.
En los videos que fueron grabados por curiosos que se encontraban en el lugar y que fueron subidos a redes sociales se observa la hazaña de los elementos del Ejército al hacer toda clase de esfuerzos por sacar al menor del charco donde quedó prácticamente paralizado al tocar los cables de la Comisión Federal de Electricidad y se escuchan los gritos de desesperación de su madre al verlo tirado en el suelo y pensar que estaba muerto.
La señora Arely Guadalupe García Arce, madre de la víctima, cuenta que ese día ella se encontraba en su domicilio a unos metros del lugar donde ocurrieron los hechos y fue alertada por una vecina sobre que Luis había tenido un accidente.
La madre de familia asegura que al enterarse de la noticia salió a prisa de su casa y corrió a toda velocidad hasta llegar a la zona del charco, donde prácticamente se desplomó en llanto al ver que su hijo no se movía.
Por fortuna, gracias al apoyo de los elementos del Ejército, Luis fue rescatado y llevado de emergencia al hospital localizado en la cabecera municipal.
Cree que su hijo Luis, al ser un gran admirador de los militares, al ver que los uniformados recorrían las calles de su pueblo, decidió acompañarlos sin pensar que tendría un percance en el trayecto que puso en peligro su vida.
“Sentí una emoción muy grande que mi hijo estuviera vivo y como dice la gente, volvió a nacer. Me lo llevé a Escuinapa, me lo tuvieron como 5 horas internado y le pusieron medicamento para dolor, me lo dieron de alta y me dice me duele mucho mi espalda y mi brazo, pues mañana vamos a ir temprano al hospital, le dije y ya pasé con la doctor y le expliqué. Me dice que tenemos que ir a hacerle unos estudios, una radiografía para ver si le quedó alguna secuela, pues él todavía está hinchado de su cara”, dijo.
Luis, su mamá, el resto de la familia y los habitantes de este pueblo pesquero están totalmente agradecidos por la gran hazaña de los elementos del Ejército, quienes sin importar arriesgar su propia vida, rescataron a este adolescente.
“Muchísimas gracias por haberle salvado la vida a mi hijo. Esto, la verdad, no se lo deseo a nadie yo. Y más a un elemento que él siempre estuvo con él cuando estuvo en el hospital, ese soldado fue el que lo hizo muy fuerte a él, muchísimas gracias. No sabemos el nombre de él porque en ese momento no sabía ni cómo le iba hacer”, dijo conmovida la madre.
Con un “muchas gracias” Luis agradece el apoyo que se le brindó y promete cumplir su gran sueño de convertirse en un gran soldado cuando sea grande para apoyar a toda la población.
Aunque el estado de salud del adolescente es establece, los doctores le recomiendan a sus familiares hacer otros estudios médicos para descartar daños producidos por la descarga eléctrica.
Al ser una familia de escasos recursos, no cuentan con dinero para cubrir los gastos de trasladado al hospital a la cabecera municipal ni para pagar los estudios que le ordenen los doctores, por lo que piden el apoyo de las autoridades y de la población.
