Un enfrentamiento a balazos entre militares del Ejército mexicano y un grupo de sicarios de grupos del narcotráfico dejó como saldo siete muertos y seis detenidos, en una zona boscosa del estado mexicano de Michoacán.
Información de la XXI Zona Militar, con sede en la ciudad de Morelia, Michoacán, precisó que el enfrentamiento ocurrió en una zona rural del poblado denominado como Tacario, en el municipio de Hidalgo.
El grupo de sicarios se desplazaba en al menos tres vehículos, sobre un camino de terracería, donde se encontró con un convoy militar que realizaba operaciones contra el crimen organizado.
En el enfrentamiento, un militar fue asesinado y otro más resultó herido, mientras que seis civiles armados fueron abatidos y otro sufrió heridas de bala. El sicario lesionado fue detenido con otros cinco cómplices.
El Ejército mexicano reportó que tras el enfrentamiento se decomisaron a los civiles 12 rifles de asalto, de los tipos AK-47 y AR-15, así como decenas de cartuchos útiles y tres vehículos.
Los detenidos fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la República (FGR), en la ciudad de Morelia, la cual investiga a qué cártel del narcotráfico pertenecen.
Hidalgo es un municipio que se ubica al oriente del estado de Michoacán, donde operan los cárteles autodenominados de Los Correa, Los Caballeros Templarios, La Familia Michoacana y Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Autoridades mexicanas han identificado una cruenta lucha entre estas organizaciones criminales en Michoacán, las cuales se disputan el control de la producción y tráfico de drogas como la mariguana y metanfetamina, así como otras actividades delictivas como la extorsión a empresarios y secuestros.
Con información de EFE