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Samuel Sánchez
Culiacán, Sinaloa (Café Negro Portal).- Con lágrimas, flores y en un ataúd color rosa despidieron a “Cheli”, la joven de 29 años de edad que perdió la vida el pasado lunes tras desplomarse el techo de la zapatería en la que trabajaba en el centro de Culiacán.
En la sala de velatorio, junto al ataúd donde reposa el cuerpo de Susana Araceli se encuentra su esposo Juan Diego y su hijo de apenas 11 años de edad, ambos lloran la repentina muerte de la joven.
En la funeraria también se encuentra la madre de la víctima, la señora Ramona, y los hermanos de Susana, quienes lloran a gritos al verla dentro de un féretro.
Apenas unas horas atrás, sabían que Susana desempeñaba con entusiasmo su trabajo en la zapatería B Hermanos y que después se reunirían como siempre para convivir, pero en esta ocasión no fue posible, al fallecer tras quedar bajo los escombros.
Sus hermanos cuentan que son originarios de San Javier, Badiraguato, y que “Cheli” era una excelente madre de familia, siempre mostraba una sonrisa y cantaba, por lo que difícilmente se enteraban cuando pasaba por un problema.
Su entusiasmo y disposición la llevaron a ocupar un puesto gerencial en esta zapatería, pese a contar solo con estudios básicos.
La familia cuenta que tras enterarse del derrumbe del techo de este establecimiento acudieron de inmediato al lugar, pero nadie les daba información sobre el estado de “Cheli”, hasta que el alcalde Jesús Estrada Ferreiro informó la lamentable noticia del deceso.
Una compañera de trabajo de nombre Cinthya publicó en sus redes sociales un mensaje donde lamentó el fallecimiento de Susana, a quien le decía “La Güereja”.
“Tú siempre tan ocurrente, como olvidar lo que pasamos juntas, a pesar de la distancia que hubo al final pero sabes que se te apreciaba mucho, ve no creías en ti y llegaste muy lejos, lástima que esto tuviera que haber pasado. Dios te reciba en su reino D. E. P Susana La Guereja renegada la que me sacaba canas verdes y me daba abrazos porque sabía que no me gustaban”, comentó.
Trabajadores y excolaboradores de esta empresa piden justicia por la muerte de Susana. Exigen que se otorgue una indemnización justa a su hijo y esposo.
“Espero justicia para Susana, que su familia reciba una justa aportación por parte de la empresa, que aseguren a su hijo y le den los medios necesarios para salir adelante sin ella y no solo le quieran dar $1000 pesos y las gracias como acostumbran a hacerlo”, mencionó otra usuaria en redes sociales.
A través de un comunicado, la empresa B Hermanos lamentó el suceso y aseguraron que desde el primer momento enviaron un equipo para apoyar a los afectados.
Resaltaron que colaboran con las autoridades para determinar las causas del desplome del techo de este establecimiento.
Anomalías
El desplome del techo de la zapatería B Hermanos que dejó un saldo de una mujer sin vida y 4 lesionados, evidenció presuntas irregularidades que se registran en el interior de esta empresa.
Una empleada aseguró que la sucursal que se desplomó no es la única que tenía problemas en su estructura física sino también otros establecimientos, ya que la mayoría se ubica en edificios antiguos, carecen de baños en condiciones óptimas y los empleados laboran jornadas extenuantes.
“Todos los que alguna vez hemos trabajado en B Hermanos sabemos en las condiciones que allí se trabaja: tiendas mal estructuradas, locales viejos, baños que no sirven y los empleados tienen que ir a otra sucursal a realizar sus necesidades fisiológicas, tiendas descuidadas con problemas estructurales graves, aquí en Mochis hay varias que el cualquier momento puede suceder algo parecido eso sin contar la explotación laboral que se maneja, vendedores trabajando 12 horas diarias, almacenistas gerentes y subgerentes hasta 18 horas laborando, en mi caso llegué a trabajar hasta 120 horas semanales el triple de lo que contempla la ley, por un salario apenas arriba del mínimo”, expresó un exempleado.
