Al grito de “¡Fuera!”, integrantes de la Convención Nacional Morenista, grupo disidente de Morena, exigieron la renuncia de Mario Delgado y de Citlalli Hernández como líder y secretaria del partido.
Los inconformes acusaron a los dos líderes morenistas de crear una cúpula en el partido.
John Ackerman, integrante de dicho grupo, acusó a la dirigencia de Morena de consolidar el control autoritario de la cúpula del partido a través de sus congresos.
“La convocatoria al Tercer Congreso Nacional Ordinario de Morena tiene la clara intención de consolidar el control autoritario de la cúpula del partido y desaparecer a la militancia más digna y congruente que lo construyó”, acusó.
Señaló que la dirigencia actual ha traicionado a la militancia e intenta dar un golpe de estado técnico con la intención de perpetuarse en el poder.
El grupo disidente confirmó que iniciará acciones jurídicas con el fin de obligar al CEN a emitir una nueva convocatoria que se apegue a los estatutos del partido.
También hicieron un llamado a conformar brigadas para evitar que haya acarreo en las reuniones de renovación interna.
“Hago un llamado a la reflexión para que se den cuenta de todas las implicaciones que tiene esta convocatoria, son implicaciones que ponen en riesgo a Morena como el partido que soñamos los que comenzamos, no los que vinieron cuando Morena ya era un baluarte ganador de la cuarta transformación; sino esos que hacía meses nos estaban atacando y ahora resulta que son más obradoristas que cualquiera de nosotros”, apuntó Carlos Figueroa, secretario de Derechos Humanos del CEN de Morena.
(Con información de López Dóriga Digital)