Alexis Ayala desmiente rumores sobre Parkinson y recuerda que su padre sí vivió con la enfermedad

México.- El actor mexicano Alexis Ayala negó públicamente padecer el mal de Parkinson, tal como se aseguró en redes sociales semanas atrás. El intérprete pidió que el tema se trate con seriedad y respeto, pues recordó que su padre sí vivió con esta enfermedad y falleció a causa de ella.

Ayala aseguró que su estado de salud es óptimo y que no enfrenta el padecimiento que se le atribuyó. “De salud me encuentro muy bien. Tengamos respeto por lo del Parkinson. De verdad es muy delicado estar hablando de padecimientos que sabemos que muchas personas viven el día de hoy. Mi padre murió con Parkinson, fue uno de los padecimientos que tuvo”, expresó.

El rumor surgió hace tiempo, cuando se difundió que el actor padecía Parkinson debido a que se le notaba un temblor en la mano y en la cabeza. La versión rápidamente se viralizó en redes sociales y portales de espectáculos, generando preocupación entre sus seguidores.

Los fans del actor, de 60 años, se alarmaron por su estado de salud, especialmente porque en 2018 Ayala sufrió un infarto y se le descubrió una malformación en el corazón. Ese antecedente médico hizo que la especulación sobre un nuevo padecimiento cobrara fuerza y se multiplicara en distintos espacios mediáticos.

Antes de que los rumores se salieran de control, el histrión decidió aclarar cuál es su estado de salud y descartó rotundamente tener Parkinson. Con ello, buscó tranquilizar a sus seguidores y frenar la ola de especulaciones que lo rodeaban.

Ayala también pidió a los medios y al público ser cuidadosos con la información que se comparte, especialmente cuando se trata de temas de salud. “Tenemos que respetar lo que se dice y cómo se dice y no burlarme. Hablar de ese tipo de padecimientos o estar embarcando o embarrando a la gente con ciertas cosas que no sabemos a quién pueden afectar”, señaló.

Con estas declaraciones, Alexis no solo desmintió los dimes y diretes sobre su salud, sino que también envió un mensaje de conciencia sobre la importancia de respetar a quienes padecen enfermedades delicadas. Su postura refuerza la necesidad de responsabilidad en el manejo de la información dentro del espectáculo y los medios de comunicación.