Diputados federales aprobaron incrementos a el Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS), se aprobó un aumento de 3.08 pesos por litro para bebidas azucaradas listas para consumo y concentrados, polvos, jarabes, sueros, esencias o extractos que contengan azúcares o edulcorantes añadidos.
Con 351 votos a favor, 129 en contra y una abstenciones, también avalaron en lo general, una exención para sueros orales que contengan exclusivamente glucosa anhidra, cloruro de potasio, cloruro de sodio y citrato trisódico, así como una cuota de 1 peso con 15 centavos por cigarro enajenado o importado y para puros y otros tabacos labrados: la tasa impositiva pasa de 160 al 200%, y del 32% si son hechos enteramente a mano.
Plantea un impuesto especial del 8 por ciento para enajenación al público, acceso o descarga digital de videojuegos violentos o con contenido extremo y para adultos, y aumenta el impuesto de 30 a 50 por ciento sobre el monto total de juegos de apuestas en línea.
Al fundamentar el dictamen, Daniel Murguía señaló que México, ocupa el primer lugar mundial en consumo de bebidas azucaradas, y de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición, los niños menores de 4 años presentan problemas de sobrepeso, los niños de 5 a 11 años, de 36%, mientras que los alumnos de 20 años y más, representan un 75.2% de sobrepesos y obesidad, por lo que, a través de los denominados impuestos saludables, buscan atender las causas de estos problemas.
“Las reformas y adiciones a la Ley del IEPS, nos permiten avanzar hacia un sistema tributario eficiente, con mayor justicia fiscal y con un enfoque preventivo de la salud pública. Para los ingresos de la federación, el IEPS representa el 1.8% del PIB, y aporta más del 10 % de la recaudación del Gobierno Federal. Se estima que por concepto del IEPS, se recaudarán 761.5 mil millones de pesos”, indicó.
Antes, el coordinador económico del PAN, Héctor Saúl Téllez, criticó el aumento en de bebidas azucaradas que crece de 1.64 pesos por cada litro de bebida azucarada, hasta 3.08 pesos en las mismas, lo que equivale al 87% solo de ese impuesto a refrescos, aunque lamentó que se quiere vender un descuento en el gravamen a bebidas sin calorías, cuando este no existía.
“Pero lo que no podemos concebir es que nos traten de vender una película de que nos hacen un favor al reducir la propuesta del gobierno un 50% a las bebidas que no contienen calorías. Porque en realidad lo que está sucediendo es que es un nuevo impuesto, es la implementación del 100% de un nuevo impuesto. El gobierno no nos hace ningún tipo de favor. Estos no son impuestos saludables, son impuestos con un eminente objetivo de recaudación fiscal”, expresó.
(Con información de El Heraldo de México)