Las autoridades de Indonesia han pedido precaución a los residentes de la isla de Sumatra, la segunda más poblada del país, a medida que regresan a sus casas tras el fuerte terremoto de magnitud 7.1 que sacudió la región esta madrugada.
Los fuertes temblores, así como las posteriores réplicas, fueron sentidos en siete localidades de la región de Sumatra Occidental y llevaron a que centenares de ciudadanos abandonaron sus viviendas en búsqueda de resguardo en lugares de elevada altitud, según las informaciones preliminares de la Agencia Regional de Gestión de Desastres (BPBD).
El seísmo fue sentido con mayor intensidad en la regencia de las Islas Mentawai -el lugar más cercano al epicentro del terremoto y donde se registraron “fuertes sacudidas” durante tres a cinco segundos- lo que provocó que “la gente entrara en pánico y abandonara sus hogares”.
“La mayoría de los residentes” de la zona “huyeron a lugares seguros localizados en terrenos más altos que el agua. En el momento del terremoto, llovía muy fuerte y se cortó la luz”, señaló el portavoz de la agencia de mitigación de desastres de Indonesia (BNPB), Abdul Muhari, en un comunicado.
El terremoto de magnitud 7.1 que sacudió las aguas de Sumatra se registró a las 03:00 h del tiempo local y se ubicó a 15 kilómetros de profundidad, lo que hizo que las autoridades activaran la alerta de tsunami, que fue levantada dos horas después.
Pese a que no se hayan registrado muertes, heridos ni daños materiales significativos, las autoridades han instado a la población a mantenerse alerta y aumentar “su preparación y vigilancia” ante las posibles consecuencias del seísmo a medida que regresan a sus hogares.
“Como una forma de anticipación pública del potencial y la amenaza de desastres que pueden causar los terremotos, BNPB invita al público a no entrar en pánico, sino a aumentar su preparación y vigilancia ante posibles réplicas”, destaca el comunicado.
La agencia indonesia igualmente pidió a los residentes garantizar que las rutas de evacuación no estén “obstruidas por objetos grandes como armarios, mesas o refrigeradores” a fin de facilitar el paso en el caso de una emergencia.
Los terremotos son habituales en Indonesia, que se asienta sobre el llamado Anillo de Fuego del Pacífico, una zona de gran actividad sísmica y volcánica en la que cada año se registran unos 7 mil temblores, la mayoría moderados.
Una de las tragedias más letales en la región se remonta a 2004, cuando un potente seísmo de magnitud 9,1 generó un tsunami en el océano Índico que se sesgó la vida de más de 230 mil personas en una docena de países asiáticos.
Con información de EFE