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Con la franqueza que lo caracteriza, Lupillo Rivera volvió a abrir su corazón para hablar sin filtros sobre su vida amorosa, sus errores y su pasado familiar. Aunque abordó temas delicados como el abuso que sufrió su hermana Jenni Rivera, fue su confesión sobre la infidelidad lo que más llamó la atención: “¿Has sido fiel con las mujeres que te han amado?”, preguntó la periodista Pati Chapoy. “No”, respondió sin titubeos.
El cantante explicó que su fragilidad siempre ha sido el sexo femenino, y que no lo oculta. “Porque mi debilidad son las mujeres… y lo saben todas”, dijo entre risas, reconociendo que su historial sentimental está marcado por relaciones intensas, pero no necesariamente monógamas. La declaración, aunque directa, dejó entrever una mezcla de honestidad y autocrítica que pocos artistas se atreven a mostrar.
Lupillo, quien tiene seis hijos de dos matrimonios, aseguró que actualmente mantiene una relación estable, aunque no tiene planes inmediatos de casarse. “Todavía no estamos pensando en eso, pero tenemos una bonita relación”, comentó, sin dar más detalles sobre su actual compañera sentimental.
Más allá de su vida amorosa, el intérprete de “Despreciado” también habló sobre uno de los episodios más dolorosos de su familia: el juicio contra José Trinidad Marín, exesposo de Jenni Rivera, acusado de abuso sexual contra ella y sus hijas. Lupillo confesó que quiso enfrentarlo físicamente, pero fue su hermana quien le pidió que no se involucrara. “No le puse una chinga porque no me dejaron”, dijo, recordando que “La Diva de la Banda” le pidió que no asistiera más a las audiencias para evitar que él se metiera en problemas legales.
El cantante también compartió detalles de sus inicios en la música, cuando cantaba en restaurantes por 20 o 30 dólares para mantener a su familia. Se casó por primera vez a los 18 años, justo después de graduarse de la preparatoria, y estuvo a punto de enlistarse en el ejército de Estados Unidos, pero decidió quedarse cuando su esposa le anunció que estaba embarazada. “Por eso digo que mi primera hija me salvó la vida”, expresó.
Con estas declaraciones, Lupillo Rivera se muestra como un hombre complejo, marcado por sus pasiones, sus errores y su lealtad familiar. Su sinceridad sobre la infidelidad no busca justificar, sino reconocer abiertamente una parte de su historia que, aunque incómoda, forma parte de su identidad. En tiempos donde muchos prefieren callar o maquillar sus verdades, el famoso elige hablar de frente. Y eso, para bien o para mal, lo distingue.
