El ministro del Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil, Alexandre de Moraes, emitió este viernes una orden para suspender la operación de la red social X en todo el territorio brasileño. Esta decisión se tomó luego de que la empresa, propiedad del multimillonario Elon Musk, incumpliera repetidamente con las órdenes judiciales emitidas por el ministro.
La Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) fue notificada para llevar a cabo la suspensión de X en un plazo máximo de 24 horas. Según las directrices de Moraes, la red social debía designar un representante legal en Brasil, una medida obligatoria para todas las plataformas de redes sociales que operan en el país. Sin embargo, X no cumplió con este requerimiento, a pesar de que se le otorgó un plazo de 24 horas para hacerlo, el cual venció el jueves a las 20:07 horas.
Además de la falta de un representante legal, X también ha desobedecido órdenes judiciales relacionadas con la eliminación de perfiles que, según las autoridades, difundían información falsa y atacaban a las instituciones democráticas de Brasil. Esta desobediencia ha generado multas acumuladas de hasta 18 millones de reales (unos 3.19 millones de dólares / 62.88 millones de pesos mexicanos), que la empresa tampoco ha pagado.
En medio de esta disputa legal, X cerró su oficina en Brasil el 17 de agosto, citando amenazas de arresto hacia su entonces representante legal en el país. Sin embargo, la plataforma continuó ofreciendo sus servicios a los usuarios brasileños. Aunque X argumenta que las órdenes judiciales emitidas por Moraes son “ilegales”, el ministro ha mantenido su postura firme, lo que ha llevado a la suspensión total de la red social.
La orden de suspensión también afectó a Starlink Holding, otra empresa de Elon Musk. Moraes bloqueó cuentas vinculadas a Starlink en Brasil debido a la falta de cumplimiento de las regulaciones locales. En respuesta, la empresa calificó las acciones de Moraes como “inconstitucionales” y anunció que apelaría la decisión ante los tribunales.
El propio Elon Musk también se pronunció al respecto, defendiendo que SpaceX y X son entidades completamente distintas, con diferentes accionistas. Musk, quien posee el 40% de las acciones de X, calificó la acción de Moraes como “absolutamente ilegal” y aseguró que la decisión perjudica tanto a los otros accionistas como al pueblo brasileño.
(Con información de Excélsior)