La Fiscalía Federal del Distrito Este de Nueva York retiró formalmente los cargos en su jurisdicción contra Ovidio Guzmán López, alias “El Ratón”, hijo del narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán, una semana antes de que el acusado formalice su declaración de culpabilidad en un juicio separado en Chicago.
La decisión marca un giro estratégico en el proceso legal en su contra en Estados Unidos, donde enfrenta acusaciones por narcotráfico, conspiración y lavado de dinero.
Según documentos judiciales, la Fiscalía de Nueva York desestimó los cargos en coordinación con el Departamento de Justicia, priorizando el caso en Illinois, donde Guzmán López habría llegado a un acuerdo de culpabilidad que podría reducir su condena.
Las autoridades no especificaron los términos, pero fuentes cercanas al caso sugieren que la medida busca evitar duplicidad en los procesos y concentrar recursos.
Ovidio Guzmán enfrentaba en Nueva York acusaciones por conspiración para distribuir cocaína, metanfetamina y heroína hacia Estados Unidos, lavado de dinero mediante operaciones ficticias en México y en territorio estadounidense, así como por asociación delictiva vinculada al Cártel de Sinaloa.
En Chicago, los cargos son similares, pero incluyen testimonios de colaboradores que lo señalan como uno de los líderes de la facción tras la extradición de su padre en 2017.
Fue detenido en enero de 2023 en Culiacán, Sinaloa, tras un operativo militar que desató violentos enfrentamientos. En septiembre del mismo año, fue extraditado a Estados Unidos, donde enfrentaba procesos en múltiples distritos.
Expertos en temas judiciales señalan que esta decisión responde a una estrategia para evitar juicios duplicados, ya que los casos en Nueva York y Chicago compartían fundamentos.
Además, Guzmán López habría pactado colaborar con autoridades estadounidenses a cambio de beneficios procesales. El gobierno federal prioriza casos con mayor evidencia, y en el proceso en Chicago hay testigos que lo vinculan directamente con el tráfico de drogas hacia Estados Unidos.
Ovidio Guzmán tiene 34 años y fue identificado por autoridades como uno de los líderes de la célula conocida como “Los Chapitos”, junto con sus hermanos Joaquín, Iván Archivaldo y Jesús Alfredo, quienes heredaron el control del Cártel de Sinaloa tras la captura y extradición de su padre.
Según la DEA, Ovidio estaba a cargo de supervisar rutas de tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos, siendo una pieza clave dentro del engranaje criminal de dicha organización.
En el caso de Chicago podría enfrentar una condena de cadena perpetua, aunque el acuerdo alcanzado podría reducirla a entre 20 y 25 años. Su padre, “El Chapo” Guzmán, fue condenado a prisión de por vida en 2019 en Estados Unidos.
Sus hermanos también están bajo investigación, y Iván Archivaldo fue extraditado en 2024.
El próximo 15 de julio, Ovidio Guzmán formalizará su declaración de culpabilidad en la corte de Chicago.
Por su parte, la Fiscalía de Nueva York mantendrá los archivos del caso activos por si el acuerdo llegara a romperse.