Irene González
Culiacán, Sinaloa (Café Negro Portal). – Integrantes del Movimiento Democrático Universitario llevan a cabo una manifestación en el Congreso del Estado para pedir la intervención de las y los diputados debido a que la permanencia de Robespierre Lizárraga Otero como encargado de la rectoría de la UAS pone en riesgo la expedición de más de 20 mil títulos de estudiantes que están por graduarse de sus respectivas carreras.
Durante la sesión ordinaria de la Diputación Permanente, los universitarios expresaron la necesidad de que se cumpla con lo que establece la normatividad y se nombre a un rector sustituto en la institución que concluya el periodo para el que fue electo Jesús Madueña Molina, quien fue separado de cargo en octubre del año pasado por haber incurrido en presuntos actos de corrupción.
Arturo Nevárez, maestro de la Facultad de Psicología de la UAS, manifestó que la Ley Orgánica en su artículo 35 establece que las ausencias del rector titular hasta por 40 días serán cubiertas por el secretario general, después de 41 hasta los 80 habrá de nombrase un interino y si el periodo excede ese plazo, el Consejo Universitario tendrá que convocar para que la Comisión de Postulación presente una propuesta a fin de nombrar al nuevo rector.
Sin embargo, dijo que el Consejo Universitario se pone por encima de la propia normatividad, dos días después de la separación de Madueña Molina lo declaran perseguido político y se nombra a Robespierre Lizárraga como encargado de despacho.
“A nosotros nos parece eso una aberración, el Consejo Universitario no está por encima de la Ley Orgánica, han pasado ya 68 días después de la separación de Madueña, ya se vencieron los primeros 40 días en donde el secretario general debió de haberlo cubierto y están próximos ya ha cumplirse los 80 días, situación que nos parece inaceptable, toda vez que la decisión de las autoridades de la universidad o de quien conduce a la institución, que es el maestro Cuén Ojeda quiere dejar por la vía del hecho a Robespierre”, aseveró.
Manifestó que desafortunadamente esto está metiendo a la institución en una situación delicada y complicada debido que el pasado 12 de enero estudiantes concluyeron sus estudios profesionales y están por expedirse los títulos universitarios que deben ser firmados por rector y el secretario general, pero al no haber una autoridad legal, los mismos pueden carecer de validez o no expedirse.