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El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, afirmó que fueron las celebridades quienes rechazaron el diálogo, previsto para hoy en Palacio Nacional, sobre el Tramo 5 del Tren Maya.
En la conferencia matutina, López Obrador advirtió que dichas celebridades de la campaña “Sélvame del Tren” querían usar al Gobierno de México.
Acerca del diálogo pues resultó que los que salieron en la televisión y los medios rechazaron el diálogo, dijeron que no, ¿cómo se llama el actor? Eugenio Derbez y otros. Querían que recibiéramos a ambientalistas, reales o supuestos también, que no sabemos y que incluso tenemos ciertas dudas sobre su actuación”, apuntó.
“Entonces lo mejor, para que no nos usen, porque ya sería el colmo que los conservadores corruptos quisieran utilizarnos. Lo mejor es que los atienda la Semarnat, el director de Fonatur, que es el responsable de la obra del Tren Maya y también les estamos pidiendo que dialoguen con las comunidades”, agregó.
El Gobierno de México anunció el domingo de la suspensión del encuentro entre López Obrador y artistas que se han manifestado en contra de la construcción del Tramo 5 del Tren Maya.
Por medio de un comunicado, Presidencia expuso que varios de los invitados declararon públicamente que no asistirían a Palacio Nacional este lunes 25 de abril.
No hagamos nunca a un lado el humanismo y la fraternidad. Conferencia de prensa matutina, desde Palacio Nacional https://t.co/6YPswAw3aD
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) April 25, 2022
Este grupo de celebridades, integradas por personalidades como Eugenio Derbez, Kate del Castillo, Omar Chaparro, Bárbara Mori o Natalia Lafourcade, entre otros, participaron en marzo pasado en la campaña “Sélvame del Tren” para manifestarse en contra del Tren Maya, uno de los proyectos insignia de López Obrador.
El Tren Maya es un proyecto prioritario para López Obrador que, con una inversión de alrededor de 200 mil millones de pesos, plantea construir cerca de mil 554 kilómetros de vía férrea en cinco estados del sureste del país: Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
La obra no ha estado exenta de polémica y ha sido criticada por organizaciones y colectivos indígenas de la zona, debido a su impacto ambiental en la región.
Con información de López-Dóriga Digital
