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Las especulaciones con respecto a lo que pasaría con la morada que compartieron Shakira y Gerard Piqué en Barcelona durante los años de su relación han quedado en el pasado tras anunciarse que la expareja puso a la venta el inmueble, aunque los potenciales compradores deberán cumplir ciertos requisitos.
Luego de varios meses de disputa legal por la manutención y cuidado de sus dos hijos, el exfutbolista y la cantante finalmente firmaron un acuerdo en los juzgados, y si bien se pensó que la casa seguiría habitada por Piqué, ahora ha trascendido que el lugar tendrá nuevos dueños.
Para evitar que personas curiosas merodeen la zona donde está ubicada la residencia o que haya quienes soliciten una visita nada más con afán de constatar cómo es por dentro la propiedad, la inmobiliaria ha solicitado determinados requisitos para brindar una cita a los potenciales compradores.
Por tal motivo, la casa no será publicitada ni tampoco habrá fotografías en sitios web o lugares comunes donde se difunden inmuebles a la venta.
Además, los compradores interesados deberán comprobar que, efectivamente, tienen el poder adquisitivo para comprar una mansión de esa magnitud.
De acuerdo con medios españoles, la propiedad está valuada en 14 millones de euros (alrededor de 280 millones de pesos) y se ubica en una zona exclusiva de Barcelona, en Esplugues de Llobregae.
El predio consta de 3 mil 810 metros cuadrados y fue construido en 2012. Su diseño arquitectónico es minimalista, con grandes ventanales y vistas espectaculares hacia Barcelona.
Cuenta con tres pisos, más otros dos subterráneos con garaje y bodega. Tiene salón de juegos, biblioteca, gimnasio, sala de cine, piscinas, canchas de fútbol y pádel.
A pesar de que el terreno está unido a la casa de los padres del también empresario, ellos conservarán su hogar, por lo que solo entra a la venta la lujosa mansión de la expareja.
