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En un episodio inusual en la vida parlamentaria, el senador de Morena Gerardo Fernández Noroña ofreció una conferencia de prensa en el Senado de la República para “defenderse” de las críticas recibidas por sus declaraciones contra la alcaldesa de Uruapan, Grecia Quiroz, viuda del exalcalde Carlos Manzo.
El legislador acusó a Quiroz de haber adoptado “una posición de ultraderecha fascista” y de que “se le despertó la ambición” para buscar la gubernatura de Michoacán.
La convocatoria, sin embargo, terminó en un salón vacío: ningún medio de comunicación de la fuente del Senado asistió. Ante las sillas desocupadas, Fernández Noroña afirmó que el desaire responde a una campaña “insidiosa y de mala fe” en su contra.
“Caray, no se presenta uno solo, porque es una campaña sesgada, perversa, sin seriedad, sin profesionalismo. Lo menos que puede hacer un medio de comunicación es preguntarle al señalado su opinión”, reclamó.
El legislador negó haber hecho comentarios misóginos y aseguró que sus palabras fueron estrictamente políticas. “Se puede estar de acuerdo o no con mi comentario, pero no tiene un gramo, un miligramo, ni un suspiro de misoginia”, sostuvo.
Fernández Noroña también acusó a quienes lo critican de haber guardado silencio frente a otros casos, como la agresión sexual contra la presidenta Claudia Sheinbaum en el Centro Histórico, o la campaña contra la modelo mexicana Fátima Bosch, a quien defendió como “humanista”.
El tema resonó en la sesión solemne con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, donde legisladoras de oposición, como la panista María de Jesús Díaz Marmolejo, señalaron que minimizar el derecho de Quiroz a participar en política constituye violencia política de género.
En respuesta, Fernández Noroña acusó a Quiroz de actuar con irresponsabilidad y obedecer a “intereses políticos” al pedir investigar a morenistas por el asesinato de su esposo. El senador concluyó que, aunque tiene espacio en sus videocharlas para defenderse, quiso hacerlo institucionalmente, pero “la respuesta de los medios fue el vacío”.
Con información de Milenio.
