Unificar al país, el reto de Claudia Sheinbaum, la presidenta electa

Irene Medrano Villanueva

Los que tanto le reprochaban a López Obrador, de dividir a los mexicanos, por su exclamación primero los pobres y criticar a los ricos, a la clase media, ahora muchos de estos últimos se lanzan contra los más necesitados, porque aseguran que ellos le dieron su apoyo a Claudia Sheinbaum, pero lo cierto es que las clases medias, esas que tanto criticó el presidente fueron determinantes para que hoy la Morenista sea la futura presidenta de México.

Considero que ahora más que nunca se necesita la reconciliación de todos los mexicanos, el país nos lo demanda, las elecciones ya pasaron, hay una triunfadora y los que menos culpa tienen son los pobres, todos, sí todos, tenemos el derecho de elegir a quien nos dé la gana.

Hay que saber perder y ver hacia el futuro, no culpar, mucho menos castigar a esa clase que necesitan los programas sociales y a los que hoy los fustigan y les quieren dar un escarmiento.

Con el “#ellosvotaronpor Morena, quelosayude Morena”, invitan a la ciudadanía a no dar propinas a los que cuidan los carros, a los paqueteros, la mayoría de la tercera edad, no donar cuando hay un desastre, etc, etc.

Debemos de entrar a una profunda reflexión para no exterminar esa solidaridad que a nivel mundial se distingue los mexicanos, insisto, ellos no tienen la culpa.

Ni tú ni yo le vamos a quitar el hambre a esos millones de mexicanos que viven en la pobreza y que necesitan de los apoyos gubernamentales, mucho menos quitarle al ser humano ser agradecido, sin embargo, muchos de ellos no votaron por Morena y Morena debe de respetarlos.

Caliente….caliente.- La futura presidenta ganó con más de 35 millones, es decir cinco millones más que López Obrador; la votación se centró de la siguiente manera: el 49 por ciento de la clase más privilegiada del país, los ricos, ricos, pues, votó por Claudia, el 59 por ciento de la clase media también emitió su voto por la morenista, es decir, la arenga del presidente en su contra, ni los despeinó.

Como se esperaba, la clase media baja le dio el 61 por ciento de votos y la baja el 71 por ciento.

De acuerdo con el estudio de Saber Votar, siete de cada 10 personas beneficiaras de los programas sociales del gobierno federal se decantaron por Morena a la Presidencia de la República y por el Congreso de la Unión.

Otro sorbito.-La organización detalla que los beneficiarios de los programas Jóvenes Construyendo el Futuro y las Becas Benito Juárez le dieron el voto a Morena.

En tanto, 6 de cada 10 adultos mayores también votaron por el partido oficialista.

Igual el 49 por ciento de universitarios también votaron mayoritariamente, al igual que los de menor escolaridad se volcaron por Sheinbaum.

Quizá en el futuro cuando los estudiosos hagan una investigación profunda se sabrá por qué desdeñaron a Xóchitl Gálvez, quizá por ser indígena, por su vocabulario, por vender gelatinas, por el lastre de los partidos políticos.

Lo cierto es que volvimos a la época del PRI cuando se llevaba carro completo y la oposición salía a las calles a gritar fraude, fraude, aunque la población no era revanchista, no se iba contra sus hermanos y nunca se estuvo en riesgo de perder la solidaridad que tanto nos caracteriza.

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