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Samuel Sánchez
Culiacán, Sinaloa (Café Negro Portal).- “No sabía que yo iba a ganar, yo no tenía esa certeza”, dijo Sara Bruna Quiñonez Estrada, tras tomar protesta como Fiscal General de Sinaloa.
En conferencia de prensa en las instalaciones del Congreso del Estado de Sinaloa, al ser cuestionada sobre qué se siente conocer que sería fiscal ante de asumir el cargo, respondió que ella en ningún momento tuvo certeza de que ocuparía este puesto, pues tal como en su tarea de jueza a un acusado no podía responder si lo condenaría o absolvería en el inicio del juicio, porque no existía ninguna seguridad sobre su destino.
Descartó ser amiga del gobernador Rubén Rocha Moya, pero sí reconoció una relación con Enrique Inzunza Cázarez, secretario General de Gobierno, pues fue su superior como magistrado presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado de Sinaloa.
Sobre el señalamiento de diputados de que vigilarán su actuación al frente de la Fiscalía General de Sinaloa, dijo que a ella “le encanta” que la vigilen y responder a los reclamos de la sociedad.
Aseguró que su labor al frente de la fiscalía dará certeza a las familias para que se acerquen a denunciar al implementar un mecanismo para reducir los tiempos de espera en esta materia.
Uno de los principales delitos que buscará contrarrestar en la entidad será la violencia familiar, principalmente los feminicidios.
Respecto a la depuración de escoltas y disminución de su salario, respondió que nunca hizo una manifestación sobre el tema durante el proceso de elección, pero su equipo de seguridad debe ser mínimo y sobre el sueldo que por el momento no tiene opinión pues desconoce cuánto percibe el fiscal por este cargo.
Durante la conferencia, la fiscal general de Sinaloa fue cuestionada sobre si invitaría a Dámaso Castro Zaavedra al cargo de vicefical, respondió que lo conoció en los tribunales pero desconoce si él quiere trabajar con ella.
Quiñónez Estrada expresó que “le intimida y mortifica” que piense un grupo de la población que existió línea en su designación, pues fue su decisión participar en este proceso y no tuvo ninguna presión.
Al denunciar abogados que de llegar al cargo enfrentaría conflictos de intereses al ser su hija jueza , dijo que en la convocatoria para la elección de fiscal no existe una prohibición al respecto.
“Me incomoda porque da entender que sería capaz de manejar eso a favor de alguien”, respondió.
