El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) consideró que desde el punto de vista humanitario es imperioso aumentar el número de identificaciones de personas fallecidas en México.
Al inaugurar el XIV Encuentro Nacional de Servicios Médicos Forenses en Tijuana, frontera con Estados Unidos, el CICR dijo que “es crucial coordinar las actividades para contribuir a aliviar el sufrimiento de miles de familias que buscan a sus seres queridos desaparecidos”.
Según cifras oficiales, en México existen más de 111 mil personas desaparecidas y cerca de 52 mil personas fallecidas sin identificar, muchas de las cuales son buscadas por sus familiares.
El CICR apuntó que para poder identificarlas, “no basta con tener un registro, sino que es necesario contar con información detallada sobre cada una de ellas”.
“Cada persona fallecida no identificada lleva consigo una historia, un legado y una familia que anhela respuestas. Identificarlas es un deber, un acto de humanidad y un derecho consagrado en la ley en materia de desaparición”, dijo Mitzi López Murrieta, jefa de la misión del CICR en la región noroeste de México.
El CICR, organización humanitaria que trabaja para ayudar a las personas afectadas por la violencia armada, reconoció los esfuerzos a nivel país y estados tendientes a contar con más infraestructura para el resguardo digno y la trazabilidad de las personas fallecidas no identificadas.
Pero “estas medidas no serán suficientes sin un aumento paralelo del número de identificaciones, para que las personas fallecidas que aún no han sido identificadas puedan ser entregadas a sus familias”, advirtió López.
Explicó que para lograrlo, es necesario homologar herramientas, criterios y metodologías, así como procesos forenses eficaces que incluyan la participación de las familias. De esa manera, dijo, se propiciará la obtención de información de calidad para la identificación de personas fallecidas.
Además, dijo, es indispensable establecer una conexión permanente entre las instituciones académicas y las encargadas de procuración de justicia para formar profesionales forenses que cuenten con la experiencia y las capacidades técnicas que permitan dar una respuesta integral y sensible a las familias.
“Este momento histórico exige la reinvención de un especialista forense único: el especialista en identificación forense”, indicó.
El CICR también resaltó la importancia de armonizar las leyes locales con la Ley General en Materia de Desaparición de Personas (LGDP), incluyendo la legislación de Baja California.
En la inauguración del encuentro estuvieron presentes el subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación de México, Alejandro Encinas, y la titular de la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas, Karla Quintana, entre otros.
“Contar con más de 50 mil cuerpos en las fosas comunes o en los servicios forenses de todo el país -incluido el de la Fiscalía General de la República (FGR)- requiere una acción no solamente de coordinación institucional, sino una acción del conjunto del Estado mexicano”, dijo Encinas.
Por su parte, Quintana destacó la importancia de “poner al centro la búsqueda de las personas desaparecidas -el derecho a ser buscado- y también el derecho a ser identificado, el cual tiene una doble vertiente: de verdad y de justicia”.
También, dijo, “como una forma de reparación: evidentemente se les busca con vida, pero también sabemos que existe una posibilidad de que estén sin vida”.
Con información de EFE